Caldo de cultivo

21.5.05

*Pausa*

Me voy a San Luis Potosí. Probablemente vuelva el 6 de Junio.

Trataré de checar el correo y el blog constantemente. Gracias.




Huelo a tí; la boca, las manos y el pelo. Hoy debería dormir acompañado.

Herviré mis dedos, mi boca y mi pelo y te beberé como azahar, para dormir (incluso y con pesar) sin piel (y tú adentro).

Hay un frasquito de granos de café sobre el mostrador. Casi lloro.

Hoy deberíamos dormir (a pesar de todo) acompañados (y yo adentro).

20.5.05

Aventuras

No creo que pudiera tener una con una francesa. El hecho de que la higiene sea algo tan fútil para ellas me pone asqueado.

Por cierto, ¿cómo decirle -elegantemente- a alguien que huele feo, cuando no tienes la suficiente confianza, pero sientes la simpatía de pasarle el dato para evitarle momentos embarazosos con alguien más?

¿Es mejor dejarlo pasar la noche tal cual galán se imagina él mismo? o ¿habrá que comentarle para evitarle penosos asuntos a costa de preocuparlo el resto de la noche por fragancias axilares?

17.5.05

Fe de erratas

La decadencia de esta página sigue quitándome la paciencia.

Las larvas inútiles que brindan este servicio siguen siendo larvas inútiles a pesar de mis quejas.

Los administradores de Blogger siguen siendo insuperables, eminentes, notables y soberanas Heces Fecales (con mayúscula).



...pero me ideé la fabulosa manera de seguir posteando a pesar de la increíble imbecilidad de estos sujetos. Deberé partir los posts en dos o más secciones, así que será dificil buscarlos por índice.

Agregué 'Graduación' y renove 'Sospechas'.

Es todo. Gracias.

Graduación (Ibamos)

9:00 pm - Ya viene el Daniel aquí conmigo. Voy por tí, vamos por el Licorcito de Naranja, cenamos antes y agarramos pa'llá.

10:00 pm - ...Simón... ajá.... bueno, ni pe'o. Sí... Chao. *Llamada terminada* Oye Pollete, pos nos quedaremos a atascarnos la comida china que quedó en tu casa. No va a haber cena y estamos pobres y desamparados. ... Sí, no hay bronca, aceptamos las sobras.

11:00 pm - Ala madre... *Subiendo vidrio*. Qué pena este trío de maricas cantando Kalimba a todo. Ustedes hagan como que veníamos cantando algo bien varonil... *Cambio de faceta* ¡Me la pelan! ¡Me la pelan! ¡Me la pelan en la rima, me la pelan en la...!

Graduación (Llegamos)

11:30 pm - ¡Ea! ¡Esa me gusta! ¡Vamos a bailar YA! *Corre*

12:00 pm - ¡Alaaa! ¡La rola we! *Baila*

1:00 am - Me duelen las nalgas y este pastelito ya me dió güeva...

1:30 am - Tengo sed. *Bebe*

Graduación (Salimos)

2:00 am - ¡Eh Tiago! No sabes llegar al rancho? ... ¿Tampoco? *Tsk Tsk* ...¡Sí, simón! ¡Tú sígueme!

2:30 am - ¡Wey, hay nueve carros siguiéndonos y supuestamente los estábamos guiando! ¿¡Cómo que no sabes cómo llegar!?

Graduación (Bebimos y Desayunamos)

Bebimos...

5:00 am - ¡Mocos, ya amaneció! A ver, a ver. Haz como que eres un oficial que me detiene... pa' mí que no se me nota la cara de ebrio.

Desayunamos...

6:30 am - ¡Abran ya!

Graduación (Nos metíamos)

7:30 am - ¡En serio oficial, no estoy tomando! ... ¿Él? No, para nada. Tenemos sueño, no estamos borrachos. ... ¡Pues claro! Alguna manera van a encontrar para quitarme el carro. ... Mire, con todo respeto, andamos muy cansados y no queremos andar perdiendo el tiempo en un examen de salud que obviamente voy a pasar, pues no he tomado, oficial... *Charla larga*

7:45 am - Sí, sí, oficial. Gracias por entender. Que tenga un buen día...*Arranca* ...¡¡Uuuyy!! Ya veía el Tsurito en el corralón.

9.5.05

Yo digo...

¡¡BLOGGER ES UNA MIERDA!!

¡¡¡Y OJALÁ QUE TODOS LOS QUE TRABAJAN EN BLOGGER SE AHOGUEN EN UNA TONELADA DE MIERDA!!!

3.5.05

Sospechas

Esa noche yo tenía sospechas.

Llegué con The Cure y su "The end of the world".

Yo me sentía valiente esa noche así que hice mi pedido, sin mirar a los que ya de antemano esperaban: grande y de carne porque eso seguramente comen los gladiadores que no le temen a nada.

Me paré con una mano en la bolsa, la otra sobre la bebida mirando la noche con ocupación. Y que nadie me mirara porque hoy yo tenía sospechas y estaba valiente (No sé si estaba valiente por no quebrarme o no me quebraba por estar valiente).

Un Jeep negro, polarizado como presunto transporte de la mafia, con dos sujetos de traje, se detuvo con luces intermitentes sin importar el tráfico veloz y peligroso de esas altas horas de la noche. El de bigote y cara de jefe obeso de la judicial se bajaba del carro mientras el pelón con apatía de matón corrupto urgaba en la guantera, mirando con precaución, desde el carro, a los dudosos tragones de la carreta.

- ¡Buenas noches a todos! -y se acercó el bigotón, con sorna, al más cercano. Gritaba para que nadie perdiera el hilo de lo que tenía ínfulas de ser un largo e incómodo monólogo- Estoy buscando un lugar. Una discote... uhm... un antro, más bien. Tiene dos pisos, ¿alguno de ustedes sabe de alguno aquí cerca? Algo así me dijeron.

La cara de todos era la misma que uno pone cuando uno está en primera fila del teatro y al protagonista se le ocurre jalar a gente del público: no quieres perder ningún detalle, pero tampoco quieres caer en la ridicula propuesta de ir a verte estúpido sobre el escenario; los ojos esquivaban diestramente su mirada sin perder ningún movimiento del bigotón. Yo me reía de su forzada seguridad (la frente le sudaba y su conversación intranquila y presurosa me hacía pensar que en cualquier momento iba a pedirnos las carteras a punta de pistola).

Se acercó hasta la carreta mientras hablaba de la carne exquisita y del antro de dos pisos, cuando repentinamente miró hacia el sujeto que estaba junto a mí, olvidando definitivamente a qué venía.

- ¡Claro que yo te conozco! No recuerdo de dónde, pero yo sé que te conozco a tí -se dirigía a uno con la confianza del tío que nunca ves y que quiere ser gracioso a fuerza de llamarte "campeón" y hablarte de trucos para ligarte a las "viejas".

- Sí, me conoces -habló tan bajo, que parecía no querer reconocerlo-. Piénsale y te vas a acordar -y siguió comiendo.

- ¡Tienes que decirme de dónde te conozco, porque tu cara me suena conocida maestro!

- Piénsale -él sabía que el bigotón se iba a poner terco.

Y así fué. La charla cambió a murmullos por varios minutos, donde se alcanzaban a distingir distintos nombres, lugares y horarios. Ya se había vuelto suficientemente sospechoso el interés del bigotón por saber de dónde había conocido a este sujeto, cuando ambos se movieron en silencio hacia la parte de atrás de la carreta; el gordo bigotón preguntaba con desespero y el sujeto respondía con tedio y desprecio.

Repentinamente, el bigotón caminó al carro tan ágilmente como su barriga le permitía y el pelón le pasó un maletín de plástico negro y orillas metálicas. Sobre la tapa del Stratus que estaba junto a la carreta, descubrieron una enorme cantidad de papeles.

- ¡No me chingues maestro! -arreciaba el ruidoso bigotón y el sujeto respondió con prisa entre murmullos nerviosos.

Ya hacían algunos minutos que yo había terminado mi cena, así que ya no había pretexto para seguir siendo audiencia. Pagué y me subí muy lentamente al carro esperando un descenlace que aclarara los motivos del Jeep negro.

Nada sucedió.

Prendí el carro y continuaba "The end of the world". Me retiré del lugar con mi valentía, el hambre saciada y mis sospechas (una más se agregaba: el gordo bigotón).

Volví algunos minutos después. La carreta estaba vacía, pero intacta; las luces encendidas y trocitos de carne abandonados, por feos, seguían sobre la plancha . Alrededor no había ni carro, ni persona que diera señal de actividad. Sólo habían hojas tiradas por doquier, un par de zapatos, una camisa y un olor penetrante a gasolina.

De atrás de la carreta salió repentinamente el pelón del Jeep mirando fijamente hacia el carro. Olvidé la valentía y arranqué sin pensarlo.


Hasta la fecha tengo mis sospechas... (Y otra más).

1.5.05

Ay, qué verdades dices...

Si hubiera de morir dentro de unos instantes, escribiría estas sabias palabras: árbol del pan y de la miel, ruibarbo, cocacola, zonite, cruz gamada. Y me echaría a llorar.

Uno puede llorar hasta con la palabra «excusado» si tiene ganas de llorar.

Y esto es lo que hoy me pasa. Estoy dispuesto a perder hasta las uñas, a sacarme los ojos y exprimirlos como limones sobre la taza de café. («Te convido a una taza de café con cascaritas de ojo, corazón mío»).

Antes de que caiga sobre mi lengua el hielo del silencio, antes de que se raje mi garganta y mi corazón se desplome como una bolsa de cuero, quiero decirte, vida mía, lo agradecido que estoy, por este hígado estupendo que me dejó comer todas tus rosas, el día que entré a tu jardín oculto sin que nadie me viera.

Lo recuerdo. Me llené el corazón de diamantes —que son estrellas caídas y envejecidas en el polvo de la tierra— y lo anduve sonando como una sonaja mientras reía. No tengo otro rencor que el que tengo, y eso porque pude nacer antes y no lo hiciste.

No pongas el amor en mis manos como un pájaro muerto.

-- Jaime Sabines --

...pues suele pasar que no tengo manos de nido.

Si me preguntaran mi opinión, diría que, con sobrada razón, la piel de los árboles viejos es gruesa y quebradiza.

Pero hay que aplaudir, pues vaya que es fuerte su ilusión: yo no esperaría cien años con los brazos abiertos por un abrazo.

Brevemente en Phoenix

Me fui a Phoenix desde el Jueves y volví ahora en la noche. Iba a una conferencia de Knowledge Management, impartida en la ASU (Arizona State University), organizada por los ingenieros en sistemas.

Pensé que iba a ser algo impresionante, pero nada del otro mundo; profundizar conceptos que ya había visto, aprender ciertos métodos y definiciones interesantes que nunca en mi vida había oido y resolver algunas dudas que no había podido responder.

No me quejo, pues vengo contento del viaje y satisfecho con la conferencia.

El viaje de ida fue agotador y el de regreso algo tedioso. Compré un par de cosas. Comí conservadoramente. Vi varias películas (Fight Club, Snatch, Spy Game, Say it isn't so, entre otras). Caminé mucho.

...Vuelvo a la crudeza de tener que desvelarme para terminar un reporte, aún después de llegar tarde y cansado del viaje.

¡Mierda!