Peñasco, de vuelta.
El viernes pasado volví de Peñasco.
Me puse bien nervioso cuando avisé que quería renunciar.
Inclusó consideré la posibilidad de ponerme un pareo sexy, pantalones de cuero ajustados y extensiones güeras para cantarle al jefe bigotón "te aviso, te anuncio, que hoy renuncio...", a ver si así se ponía menos tensa la cosa.
Lo aceptó, pero hay algo que me incomoda.
Sin embargo, no vuelvo a Peñasco y estar sentado horas en el despacho sin hacer nada de provecho me agota.
No tengo nada más que comentar.
Me puse bien nervioso cuando avisé que quería renunciar.
Inclusó consideré la posibilidad de ponerme un pareo sexy, pantalones de cuero ajustados y extensiones güeras para cantarle al jefe bigotón "te aviso, te anuncio, que hoy renuncio...", a ver si así se ponía menos tensa la cosa.
Lo aceptó, pero hay algo que me incomoda.
Sin embargo, no vuelvo a Peñasco y estar sentado horas en el despacho sin hacer nada de provecho me agota.
No tengo nada más que comentar.
posted by Calvin at
10:49 p.m.
2 Comments:
te puedo imaginar de muchas y jotisimas formas y maneras.. y las encuentro todas ellas justificables y perdonables... pero shakira no es una de ellas...
eeeeeewwwwwwww
suerte con la chamba!
By
Lucia Galván, at 10:21 a.m.
jajajajaja tú de shakira??? jajajajaja la situación si que era desesperante!
Comprendo muy bien tu situación, no cabe duda que un trabajo así frustra y MUCHO!
Las cosas por algo pasan y algo has de haber aprendido, siendo así, ya valió la pena!
Te mando un abrazote!
By
Marali, at 11:41 a.m.
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